La cultura empresarial es una de las dimensiones de la cultura económica, ella identifica la forma de ser de una empresa y se pone de manifiesto en su actuación ante los problemas, retos y oportunidades; adaptación al cambio; en sus creencias, entre otros aspectos. Aunque existen diversos enfoques sobre esta forma de la cultura, se observan puntos coincidentes en cuanto a considerar que en el análisis de la cultura de empresa se debe tener en cuenta la historia y la evolución del contexto económico, político y social del país y de la empresa; así como parte de su contenido, a las creencias, valores, normas, los mitos, los ritos, tabúes; las llamadas zonas oscuras, de modo tal que, cada empresa tiene su personalidad y está dotada de una cultura que le es propia, en la cual se integran diferentes culturas.
Existe coincidencia en la mayoría de los investigadores en considerar que la cultura es un producto aprendido de la experiencia grupal y se localiza donde existe un grupo definido y poseedor de una historia significativa. El grupo ha compartido una cantidad significativa de experiencias importantes en la solución de problemas, lo que desarrolla una visión común del mundo que les rodea y su lugar en el.
Todo cambio organizativo debe empezar por platearse un cambio en la cultura, es decir, en el conjunto de creencias, principios y valores, implica desaprender, despojarnos de ciertas cosas que se creían inmodificables, la visión personal y colectiva deben coincidir para que haya éxitos.
En la gestión empresarial de avanzada se cuenta con un alto nivel de cultura empresarial y laboral, cuyos contenidos están basados en los valores que han logrado consolidar y por ello se le concede gran importancia a estos valores, los que poseen un poder, como fuerza integradora de individuos y grupos; son los valores los que alinean a la gente, los comprometen a todos a trabajar para alcanzar metas comunes. Se considera que ellos describen lo que es más importante para los principales implicados, identifican los resultados que la mayoría espera, sirven de guía a nuestras actuaciones y determinan sí existirán éxitos o no.